Las cuevas de Llamazares

Tomando el desvío desde Valdepiélagos a la izquierda se llega a Llamazares. Es un pueblo museo donde no paramos de sorprendernos. Observamos lo que J.LL. llamó "Ventanona", agujeros en la roca a manera de ojales. Tranquilidad, pilón con agua fresca, molino reconstruido, museo paleontológico ( no es un error, sobre sus vitrinas las etiquetas desgranan millones de años como la cosa más natural), el fósil de lepidondendrón (300 millones de años procedente de el pueblo vecino  Redilluera) y otros muchos fósiles de todas las partes de España especialmente Levante.

Si el cuerpo lo aguanta podemos, mediante una ascensión de media hora por caminos de cabras con algunos tramos en roca, llegar a las CUEVAS.

Se dice que todas las cuevas son "iguales". Estas son distintas a todas las demás. Su naturaleza orgánica y coralina las convierte en un fenómeno único. Un reto para los que lo han visto todo......Desde su entrada se contempla otra vez el curioso fenómeno de las "ventanonas" en la roca. Turismo rural y ecológico válido para lo atletas que ascienden a las rocas y para los menos atletas que disfrutan junto al pilón en el fondo del valle a la sombra de un chopo.